El aniversario
¿Se puede abandonar a un padre y a una madre? ¿Cuestionar el origen, escapar de su control?
¿Se puede abandonar a un padre y a una madre? ¿Se puede dar un portazo, bajar las escaleras y decidir no volverlos a ver? ¿Cuestionar el origen, escapar de su control? Tras una década alejado voluntariamente de sus padres, un hijo decide por fin echar la vista atrás y narrar a su familia con «la fuerza brutal de la novela». Celebra, así, un aniversario desgarrador: sin acusar y sin salvar, con un tono «escandalosamente sereno», en palabras de Emmanuel Carrère.
El resultado es un retrato de una familia arrasada por la violencia omnipresente del patriarca; un retrato lúcido y desolador, con el foco puesto en una mujer condenada a una sumisión muda y desesperada: «Mi hermana y yo estábamos en época escolar, mi padre en la del trabajo […]. Mi madre estaba dentro de su silencio». El régimen de posesión y aislamiento al que los somete el padre se agrieta solo con el timbrazo de un teléfono mal tolerado, con compañeros de clase esporádicos, con una amiga de la madre a la que pronto expulsan...
En este microcosmos concentracionario, poco a poco se instala en el hijo, y en los lectores, un deseo irrefrenable de renacer: ser uno mismo, vivir la propia vida, abrirse a los demás sin temor a represalias. El aniversario es ante todo una novela de liberación, que desmantela y desenmascara el totalitarismo de la familia. Nos hiere con su honestidad, nos desarma con su delicadeza y se transforma en un espejo en el que vislumbrar algo que quizá no conocíamos directamente y que, sin embargo, nos afecta.
«¿Puede uno liberarse de sus padres? ¿Del daño que le han hecho? ¿Sin vuelta atrás y sin apelación? Es una pregunta escandalosa. Andrea Bajani la aborda como escritor, en un libro escandalosamente sereno» (Emmanuel Carrère).
«Con un lenguaje implacable y refinado, Andrea Bajani coloca en el relato de la familia una bomba que no deja escapatoria, y la hace brillar en su libro más auténtico» (Donatella Di Pietrantonio).
«Una escritura muy clara, libre, que aborda el precio de salvarse a uno mismo» (Helena Janeczek).
«Un libro que se enfrenta como ningún otro a la pureza de los hechos, la tiranía de la memoria y el totalitarismo de la familia» (Jhumpa Lahiri).
«Afilado como un ajuste de cuentas, desgarrador como una despedida» (Antonio Scurati).
«La escritura de Bajani tiene una energía incontenible» (Enrique Vila-Matas).
«El aniversario trata sobre el patriarcado, la familia y el sueño de la autodeterminación. También trata sobre las posibilidades de la ficción y la novela como forma. Bajani es un artista extraordinario, que no hace concesiones. Cada página está escrita con lucidez, profundidad, honestidad y una inteligencia forense» (Katie Kitamura).
«En todas las familias hay una habitación cerrada en la que no entra nadie. La voz que nos guía irrumpe en esa misma habitación. Y la seguimos, conmovidos por su vulnerabilidad y sorprendidos por lo que vemos. Un libro hermoso y despiadado a la vez» (Gueorgui Gospodínov).
«Su escritura meticulosa, cautelosa, exacta, dilatoria pero implacable reabre todas las cicatrices una a una» (Daniele Giglioli, Corriere della Sera).
Sinopsis
¿Se puede abandonar a un padre y a una madre? ¿Se puede dar un portazo, bajar las escaleras y decidir no volverlos a ver? ¿Cuestionar el origen, escapar de su control? Tras una década alejado voluntariamente de sus padres, un hijo decide por fin echar la vista atrás y narrar a su familia con «la fuerza brutal de la novela». Celebra, así, un aniversario desgarrador: sin acusar y sin salvar, con un tono «escandalosamente sereno», en palabras de Emmanuel Carrère.
El resultado es un retrato de una familia arrasada por la violencia omnipresente del patriarca; un retrato lúcido y desolador, con el foco puesto en una mujer condenada a una sumisión muda y desesperada: «Mi hermana y yo estábamos en época escolar, mi padre en la del trabajo […]. Mi madre estaba dentro de su silencio». El régimen de posesión y aislamiento al que los somete el padre se agrieta solo con el timbrazo de un teléfono mal tolerado, con compañeros de clase esporádicos, con una amiga de la madre a la que pronto expulsan...
En este microcosmos concentracionario, poco a poco se instala en el hijo, y en los lectores, un deseo irrefrenable de renacer: ser uno mismo, vivir la propia vida, abrirse a los demás sin temor a represalias. El aniversario es ante todo una novela de liberación, que desmantela y desenmascara el totalitarismo de la familia. Nos hiere con su honestidad, nos desarma con su delicadeza y se transforma en un espejo en el que vislumbrar algo que quizá no conocíamos directamente y que, sin embargo, nos afecta.