Enormes cambios en el último minuto
Enormes cambios en el último minuto

Enormes cambios en el último minuto

En estos soberbios relatos, tiernos y sardónicos, y a menudo brutalmente divertidos, Grace Paley habla con su estilo inimitable de los conflictos del amor, de maridos y esposas, de padres e hijos, de la soledad. Están situados en Nueva York que, como sucede con la Rusia de Chejov —autor al que se la ha comparado—, resulta ser un lugar que a todos nos resulta familiar.

Los personajes de sus inolvidables tragicomedias habitan en un mundo de dinero escaso, demasiados hijos, maridos que desaparecen de improviso hacia quién sabe dónde. Una galería de supervivientes, con las ilusiones perdidas, que encaran las vicisitudes de la vida con una mezcla de animoso optimismo y desolada aceptación. Todo ello con un infalible sentido de la extensión (de un episodio, un diálogo, una reflexión, una historia) y del tempo narrativos.

«Al leer cualquier relato de Grace Paley, el lector es consciente de encontrarse con una voz completamente nueva: peculiar, breve, intermitente pero fluida, que cuenta en fragmentos de historias, o historias dentro de historias, una discontinua saga de la jungla urbana norteamericana» (A. S. Byatt).

En esta colección se ha publicado también el otro libro de relatos de Grace Paley, Batallas de amor:

«Una muestra espléndida de lo que puede ser una temática sin complejos» (El País).

«Grace Paley es a la narrativa lo que Sylvia Plath fue para la poesía norteamericana de principios de los sesenta... Recuperada por el feminismo, es la demostración práctica de que las mujeres también pueden aportar a la literatura ironía y humor» (Marta Pessarrodona, Avui).

ISBN978-84-339-3024-8
EAN9788433930248
PVP CON IVA7.80 €
NÚM. DE PÁGINAS158
COLECCIÓNPanorama de narrativas
CÓDIGOPN 24
TRADUCCIÓNJosé Manuel Álvarez, Ángela Pérez
PUBLICACIÓN01/01/1983
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Grace Paley

Grace Paley

Grace Paley (Nueva York, 1922 - Vermont, 2007) vivió entre dos culturas: la de sus padres, inmigrantes judíos rusos, y la de la gente de la calle, que le proporcionaba el material para sus escritos. Su obra es breve —gran parte de su tiempo lo dedicó a la política—, pero la situó en un destacadísimo lugar entre los escritores norteamericanos: «Grace Paley es a la narrativa lo que Sylvia Plath fue a la poesía norteamericana. Recuperada por el feminismo, es la demostración práctica de que las mujeres pueden aportar a la literatura ironía y humor» (Marta Pessarrodona); «Representante egregia del humor judío mejor actualizado, Grace Paley lo es también de la más rica tradición del cuento norteamericano. Narradora de excepción» (Leopoldo Azancot); «Magnífica. Opera con criterios libérrimos, aplicando las soluciones que le dicta su propio instinto anárquico o su voluntad soberana. No tiene desperdicio» (Robert Saladrigas, La Vanguardia); «Imprescindible. Una manera de entender la literatura que no cree ni en los principios ni en los finales, y mucho menos en lo unívoco de las líneas rectas. Es el lenguaje el que convierte a estas vidas en algo tan único, tan especial, tan curvilíneo e imprevisible» (Sergi Sánchez, El Periódico); «Una de las narradoras más extraordinarias de la segunda mitad del siglo XX. Relatos sagaces, irresistiblemente cómicos y de gran profundidad humana» (Cecilia Dreymüller, El País); «Cuentos cargados de humor, directos, agudos, expresivos. Un mosaico humano complejo, muy gracioso y de implacable honestidad» (Mariana Enriquez, Página/12).

Fotografía © gentl & hyers / edgereps.com