Profética, Casa de la lectura es un espacio que busca acercar los libros a la gente. En una casa del siglo XVI remodelada con audacia y buen gusto, su biblioteca pública y gratuita, con más de 25,000 títulos disponibles, su café bar y su librería son espacios de encuentro, conversación y diálogo desde 2003. Conversamos con el librero José Luis Escalera en nuestro café virtual y esto es lo que nos explica:

¿Cómo lleváis estos días? ¿Qué mensaje enviarías a los lectores desde tu confinamiento?

Son días tristes, difíciles, con miedo e incertidumbre. Somos animales sociales, vivir aislados no es lo nuestro pero en el silencio y el aislamiento podemos, quizá, conocernos mejor, descubrir quién habita dentro de nuestro cuerpo y llevarnos mejor con la persona que encontremos. Con el confinamiento también nos llega la oportunidad de hacer lo que hacemos poco por falta de tiempo: ejercicio, música, lectura, cine. Podemos aprovecharlo y salir renovados.

¿Qué actividades está haciendo la librería durante estos días?

Profética está cerrada al público, tanto la biblioteca, como el café bar, como la librería. Decidimos cuidarnos y cuidar a los lectores que nos visitan y desde el 10 de marzo cerramos las puertas.

Sin embargo, a puerta cerrada, con un equipo muy reducido y tomando todas las precauciones, estamos atendiendo pedidos en línea y afortunadamente no nos han faltado. Entregamos rápido y bien a cualquier parte del mundo, Puebla incluida.

¿Qué haréis cuando volvamos a la normalidad?

Esperamos encontrarnos un mundo más sensibilizado, más consciente de la fragilidad de la vida, más interesado en cuidar la casa común, la casa de todos. Es decir, esperamos no volver a la normalidad, porque la normalidad era el problema.

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Gracias, José Luis y gracias a todo el equipo de Profética. Muchos ánimos.

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