Prince y Léonardours
La historia de amor de los dos jóvenes héroes, perdidos en una guerra cruel y absurda en un país irreal, contada como un (perveso) libro de cuentos para niños.
Con Prince y Léonardours, su tercera novela, Mathieu Lindon se ha confirmado como uno de los escritores franceses más audaces y personales de la última narrativa francesa, y ha hecho evocar los nombres de Sade, Genet y Guyotat, o películas como La noche del cazador.
La historia de amor de los dos jóvenes héroes, Prince y Léonardours, perdidos en una guerra cruel y absurda en un país irreal, viviendo al día entre la tortura y el placer, entre deseos y traiciones en medio de un incesante vaivén de alianzas, está contada como un (perveso) libro de cuentos para niños, «unos niños cínicos y violentos que jugarían con el fuego, el sexo y la muerte para disimular mejor, con sus crueles caprichos, su necesidad de afecto» (Libération).
«Confieso que he amado infinitamente este breve libro provocativo y vulnerable en el que se confirma —¡y de qué forma tan esplendorosa!— el talento de uno de los jóvenes escritores franceses más dotados y más singulares del momento. Gracias a Mathieu Lindon la insolencia levanta cabeza. Se atreve con todo, se arriesga a todo» (Michel Nuridsany, Le Figaro).
La primera novela de este autor, Nuestros placeres, escrita con el pseudónimo de P.S. Heudaux, se publicó en esta colección:
«Bajo el nombre del autor de este libro se esconde un pseudónimo. No podía ser menos, pues en esta obra todos los vicios posibles e imaginables relacionados con la carne sale a la luz en forma generosa. Sin embargo el lector —a diferencia de las pelícilas X— no se sentirá herido, ya que todo está bañado con un desenfado que aminora, a través del humor, esta provocación permanente. Sade y algún otro de sus maestros se quedaria asombrado de su alumno, el todavia desconocido señor Heudaux. En Francia lleva varias ediciones y fue saludada por la critica como una de las obras más renovadoras de los últimos años» (César Antonio Molina, Cambio 16).
Sinopsis
Con Prince y Léonardours, su tercera novela, Mathieu Lindon se ha confirmado como uno de los escritores franceses más audaces y personales de la última narrativa francesa, y ha hecho evocar los nombres de Sade, Genet y Guyotat, o películas como La noche del cazador.
La historia de amor de los dos jóvenes héroes, Prince y Léonardours, perdidos en una guerra cruel y absurda en un país irreal, viviendo al día entre la tortura y el placer, entre deseos y traiciones en medio de un incesante vaivén de alianzas, está contada como un (perveso) libro de cuentos para niños, «unos niños cínicos y violentos que jugarían con el fuego, el sexo y la muerte para disimular mejor, con sus crueles caprichos, su necesidad de afecto» (Libération).
«Confieso que he amado infinitamente este breve libro provocativo y vulnerable en el que se confirma —¡y de qué forma tan esplendorosa!— el talento de uno de los jóvenes escritores franceses más dotados y más singulares del momento. Gracias a Mathieu Lindon la insolencia levanta cabeza. Se atreve con todo, se arriesga a todo» (Michel Nuridsany, Le Figaro).
La primera novela de este autor, Nuestros placeres, escrita con el pseudónimo de P.S. Heudaux, se publicó en esta colección:
«Bajo el nombre del autor de este libro se esconde un pseudónimo. No podía ser menos, pues en esta obra todos los vicios posibles e imaginables relacionados con la carne sale a la luz en forma generosa. Sin embargo el lector —a diferencia de las pelícilas X— no se sentirá herido, ya que todo está bañado con un desenfado que aminora, a través del humor, esta provocación permanente. Sade y algún otro de sus maestros se quedaria asombrado de su alumno, el todavia desconocido señor Heudaux. En Francia lleva varias ediciones y fue saludada por la critica como una de las obras más renovadoras de los últimos años» (César Antonio Molina, Cambio 16).